Lo que ocurrió fue que.... realmente no quería recordar. Le habían realizado diferentes pruebas médicas para descartar problemas psicomotrices, pruebas de ictus, TACS, radiografías... había probado toda clase de tratamientos. Había probado todo lo humanamente posible. ¿Qué clase de profesor sería si no era capaz de nombrar todas la cifras, todos los números que contuvieran nueve? Y... ¿Por qué el nueve?
Si no quería recordar era a causa de un trauma infantil. Sí, eso era. Un trauma provocado por aquella rígida institutriz. La misma que le castigaba con el reglón atacando sus frágiles dedos de niño cada vez que al cantar llegaban al nueve.
Las pruebas eran inconcluyentes, claro estaba. Pero, por qué motivo no sería capaz de decir el maldito nueve.... nunca lo sabremos.
No continuará.
Si no quería recordar era a causa de un trauma infantil. Sí, eso era. Un trauma provocado por aquella rígida institutriz. La misma que le castigaba con el reglón atacando sus frágiles dedos de niño cada vez que al cantar llegaban al nueve.
Las pruebas eran inconcluyentes, claro estaba. Pero, por qué motivo no sería capaz de decir el maldito nueve.... nunca lo sabremos.
No continuará.